lunes, 13 de agosto de 2007

El "SÍ" de Franklin Chang

Por Roberto Gallardo
Escritor Invitado Economía y Política
Tomado de www.roberto-gallardo.blogspot.com


Antes de anunciar que votará "SÍ" en el referendo del 7 de octubre, Franklin Chang era un ciudadano modelo, probablemente uno de los costarricenses más exitosos de la historia. Sus logros son producto del estudio constante, de la disciplina y de altos estándares éticos. Los costarricenses admiramos su humildad y su apego a nuestros valores comunes, que se sienta orgulloso de ser costarricense. Y esto último no solo es un discurso retórico: cuando terminó su servicio en el programa espacial escogió Costa Rica, teniendo posiblemente ofertas de otros países interesados, como base para el desarrollo del motor de plasma, el que impulsará las futuras expediciones espaciales.

Cuando el presidente Pacheco lo llamó a integrar la denominada Comisión de Notables, la elección, además de la de los otros distinguidos miembros, fue recibida positivamente por la la población. Cuando la Comisión emitió su informe, el mismo se tomó como un ejemplo de mesura, reflexión y objetividad.

Pero todo cambió en el momento en que Chang decidió anunciar que votará positivamente en el referendo del 7 de octubre. Súbitamente el destacado científico costarricense es un personaje cuestionable con oscuros intereses comerciales, los que antepone al interés nacional. Según algunos, el apoyo de Franklin Chang al TLC no puede ser producto de un análisis concienzudo y objetivo, sino que se origina en un contrato de construcción que la embajada estadounidense le otorgará (u otorgó, dependiendo de la versión que uno oiga) a la compañía constructora de su hermano. Es posible explicar el apoyo de Chang porque su compañía necesita la inversión del gobierno de los Estados Unidos, pero nunca porque haya hecho una valoración equilibrada del texto (que sabemos con certeza estudió a fondo como parte de su trabajo en la Comisión de Notables), y que concluyera, tal y como lo dijo, "que lo positivo supera lo negativo". Y aunque parezca increíble, algunos descalifican su posición porque en el fondo... ¡no es costarricense! (http://www.prensalibre.co.cr/2007/agosto/10/opinion05.php).

La falacia ad hominem normalmente es utilizada por los pequeños de espíritu y por aquellos de no tienen recursos para rebatir la posición autorizada de personas de la estatura de Franklin Chang. Los ataques mezquinos que ha venido sufriendo este costarricense notable no hacen mas que evidenciar las carencias de quienes lo atacan.

Y que conste que no se trata de que Chang sea infalible o que su posición no sea debatible, sino que es un costarricense que merece respeto por lo que piensa y que se debe discutir su posición sin acudir al pobre argumento del ataque personal. Respeto que no solo se merece el Dr. Chang, sino todos los costarricenses.

4 comentarios:

Cuernos Locos dijo...

A mi me llegó un e-mail, donde decía lo siguiente:

Las declaraciones de Don Franklin Chang de apoyo al TLC son una barbaridad y representan todo lo contrario a su tradición de hombre honorable y respetuoso del país.

Y no solo eso, lea bien la aberración:

Yo pienso que se cometió un error dándole la ciudadanía costarricense.

Y pa' que no le falte: La proclama insurrecionista.

Sugiero, iniciar un movimiento para solicitar que la Asamblea Legislativa le quite la nacionalidad, y que le quede solo la de Estados Unidos. De por si, nada ha hecho este personaje por Costa Rica.

...Con semejante ceguera ideológica, mis palabras están de más!

Fabián dijo...

"El TLC es ciego. Es un instrumento de comercio exterior sin conciencia social"

Franklin Chang

Anónimo dijo...

Esta es una copia textual de la declaración jurada de repudio a su
patria por Franklin Chang


'Por este medio, declaro bajo juramento, que renuncio absolutamente y
por completo y abjuro de toda lealtad y fidelidad a cualquier
príncipe, potentado, estado o soberanía extranjera, de quien o del
cual haya sido sujeto o ciudadano antes de esto; que apoyaré y
defenderé a la Constitución y las leyes de los Estados Unidos de
América contra todo enemigo, extranjero y nacional; que profesaré fe y
lealtad reales hacia el mismo; que portaré armas bajo la bandera de
los Estados Unidos cuando lo exija la ley; que prestaré servicio como
combatiente en las Fuerzas Armadas de los Estados Unidos cuando lo
exija la ley; que haré trabajo de importancia nacional bajo dirección
civil cuando lo exija la ley; y que asumo esta obligación libremente,
sin ninguna reserva mental ni intención de evasión; lo juro ante
Dios'.

Por favor no opine sobre asuntos de la patria a la que usted
libremente renunció y a cuya soberanía juró ante Dios no ser fiel ni
respetar .

Anónimo dijo...

Todos son unos corruptos claro, porque ganaràn en $$$ si se aprueba el tratado, pero tambien los lideres del no son unos corruptos, asì que no dudemos de quitarnoslos de encima luego.